El Sistema de Dirección de la Empresa
Concepto de Sistema de Dirección
El sistema de dirección es el encargado de dirigir y organizar el resto de subsistemas de la empresa. Está habitualmente compuesto por directivos profesionales, no propietarios, a los que estos últimos han delegado el poder para que lo estructuren y tomen decisiones sobre los proyectos empresariales. El sistema de dirección estará muy relacionado con el modelo organizativo adoptado.
Definición del sistema de dirección según Bueno y Valero: Como el conjunto de funciones, actividades, responsabilidades, reglas y procesos que determinan la toma de decisiones de la empresa y cuyo objetivo es la eficiencia directiva o consecución de los objetivos gerenciales de la organización.
Para lograr y fijar los objetivos gerenciales, el sistema de dirección deberá abordar problemas estratégicos y administrativos teniendo en cuenta la estructura organizativa, la estructura de poder y la cultura de la empresa.
Concepto de Estrategia
El concepto de estrategia en la empresa ha ido evolucionando. En un principio tenía un origen militar, pero posteriormente ha adquirido nuevas connotaciones. Brevemente se puede decir que en los años:
- 50 y 60: Se produjo un gran desarrollo de la estrategia empresarial debido a la preocupación existente por los problemas de dirección de las grandes corporaciones. Así surgió la planificación para tratar de ayudar, coordinar y controlar las corporaciones desde la dirección.
- Finales de los 70 y principios de los 80: El análisis estratégico se centra en el análisis del sector y la competencia.
- A partir de los 80 y principios de los 90: Pasa a centrarse en la búsqueda de la ventaja competitiva.
Concepto de estrategia: Es una búsqueda deliberada de un plan de acción que crea y desarrolla una ventaja competitiva de la empresa. La estrategia hace referencia al posicionamiento de un negocio en un sector, convirtiéndose en el sector o unidad de negocio en el centro de análisis. Los resultados de la estrategia se miden en base a análisis económicos, para conocer el éxito alcanzado y realizar posibles modificaciones.
Visión, Misión, Objetivos y Metas de la Empresa
La estrategia de una empresa tiene como principal componente la determinación de los objetivos empresariales. Podemos distinguir diversos tipos de objetivos en función del carácter general o específico de los mismos. Podemos distinguir entre misión, visión, objetivos, metas y acciones.
- VISIÓN: Es la imagen del futuro que queremos para la empresa. Se trata de marcar sin definir trazos, esbozar la empresa soñada, apuntar el norte. Las visiones dan a entender algo a muy largo plazo, constituyendo una filosofía de liderazgo.
- MISIÓN: Supone responder a las preguntas de, ¿por qué? y ¿para qué? existe la empresa. Suele referirse a la existencia de un binomio producto-mercado, aunque la pretensión es superar los productos y mercados actuales. La misión establece las necesidades a satisfacer de una clientela específica. Suelen encargar una serie de políticas o valores para lograr los objetivos de la organización y es la forma de concretar la visión de la empresa.
- OBJETIVOS: Es la concreción en el tiempo, espacio y cuantía de lo pretendido por la misión. ¿Cuánto, cuándo y dónde?. Los objetivos son guías que deben cumplir unas condiciones. Deben ser deseables, factibles, cuantificables, motivantes, consensuados, etc. Tiene que haber unas condiciones en la planificación de los objetivos, estos son:
- El nivel satisfactorio de cada uno.
- Conocer el potencial de las unidades.
- Conocer las causas que pueden limitar el cumplimiento de los objetivos.
- METAS: Son la máxima concreción de los objetivos.
- ACCIONES: Conjunto de pautas, reglas, recomendaciones, procedimientos o políticas definidas para la base operativa para poder cumplir la misión, visión, objetivos y metas.
Proceso de Dirección Estratégica
Se encarga de tomar decisiones estratégicas y de asegurarse que se ponen en práctica. El proceso de dirección estratégica se compone por 3 elementos:
- Análisis estratégico
- Elección estratégica
- Implantación de la estrategia
1. Análisis estratégico: Se pretende tener una idea del contexto organizativo y su influencia para el presente y futuro de la empresa. Debe analizarse:
- A) El contexto: Está formado por:
- El mercado o sector económico: Que delimita cuáles son los competidores de una empresa y acota el estudio.
- La estructura de la competencia: El nivel de competencia determina el nivel de rentabilidad. Este nivel viene determinado por la mayor o menor facilidad con que otras empresas pueden entrar o competir en el mercado en cuestión.
- Riesgo de nuevos competidores: Viene determinado por las llamadas barreras de entrada, o dificultad para que otros competidores puedan entrar en el sector a competir, los cuales pueden ser creados por la propia empresa o estructura del sector. La barrera de entrada por excelencia son las economías de escala.
- Las características de los actuales competidores: Se refiere a la actuación de las empresas que actualmente están en el mercado.
- La amenaza de productos sustitutivos: Ponen un tope al precio que se puede cargar a un producto y por tanto limitan la rentabilidad en un mercado e indirectamente definen el nivel de competencia.
- Los clientes: En el caso en que los productos no vayan dirigidos al consumidor final, sino a las otras empresas que posteriormente las elaboran, es importante observar la importancia de nuestros productos en sus costes, si pueden cambiar con facilidad de proveedor sin incurrir en altos costes y el número de clientes que poseemos. Del análisis de estas características podremos conocer si existe alguna posición negociadora de fuerza.
- Los proveedores: El mismo análisis hecho a los clientes debe hacerse para los proveedores, es decir, debemos analizar los costes de las materias primas, los costes del cambio y las fuerzas negociadoras de los proveedores.
- B) Los recursos de la organización: Consiste en analizar las fuerzas o influencias internas de la empresa. En particular debemos analizar el origen y la sostenibilidad en el tiempo de nuestra ventaja competitiva frente a los competidores. Esta ventaja competitiva sostenible estará basada en los recursos y competencias de la empresa. Simon define la ventaja competitiva como un desempeño superior que cumple con las siguientes condiciones:
- A: Debe ser importante para el consumidor.
- B: Debe ser percibido por el consumidor.
- C: Debe ser sostenible.
- El análisis externo permite fijar las oportunidades y amenazas que el contexto puede presentar a la organización.
- El análisis interno permite fijar las debilidades y fortalezas de la organización, realizando un estudio que permita conocer la cantidad y los recursos y procesos con que cuenta.
- C) Las expectativas de los diferentes stakeholders: Expectativas de los grupos de poder de las empresas, empleados, directivos, propietarios, sociedad en general y la influencia de la cultura organizativa definirán los objetivos y las cuentas empresariales, así como las estrategias a adoptar.
a) La elección estratégica: Una vez realizado el análisis estratégico, estaremos en condiciones de abordar la elección de una estrategia, y para ello seguiremos 3 pasos:
- 1. Generación de opciones estratégicas: Pueden ser numerosas, pero podemos detectar 3 tipos genéricos de estrategias:
- La estrategia de liderazgo en costes: Que consiste en obtener los costes más bajos del sector para competir principalmente en base al precio del producto.
- La estrategia de diferenciación: Se basa en que la estrategia consiga un prestigio único que haga sus productos atractivos con relativa independencia del precio.
- La estrategia de concentración: Supone concentrarse en un segmento específico del mercado y tratar de obtener en este segmento una ventaja competitiva que las demás empresas dispersas en todo el mercado no puedan igualar.
- 2. Evaluación de las opciones estratégicas: Esa evaluación deberá hacerse midiendo variables como la rentabilidad, riesgo, reacciones de los grupos de poder de la empresa, propietarios y la viabilidad.
- 3. Selección de la estrategia: Esta selección estará influida por la cultura de la organización y por los objetivos propuestos.
b) La implantación de la estrategia: El último elemento del proceso estratégico es una puesta en práctica. Para llevarla a cabo se ha de tener en cuenta las estructuras, sistemas, personas y la cultura de la organización.
El Proceso de Dirección de la Empresa (7P de Management)
Se apoya en una serie de funciones que permiten el cumplimiento de los objetivos. Este proceso comprende una serie de pasos descritos en el modelo de las»7P de managemen» que son: predicción, planificación, política, programación, procedimiento, presupuesto, proceso de control.
La predicción permite establecer previsiones a corto, medio y largo plazo de algunas variables. Estas previsiones permiten fijar objetivos y formular estrategias y políticas para cumplirlas. El proceso de dirección se inicia con el establecimiento de estrategias y termina con el control.
rmina con el control.