Clasificación de los Bienes
Los bienes son todos aquellos elementos útiles, valiosos o deseables. Algo inútil no se considera un bien. Para que un objeto sea considerado un bien, debe cumplir con las siguientes condiciones:
- Satisfacer una necesidad humana.
- Tener cualidades que permitan establecer una relación causal con la satisfacción de dicha necesidad.
- Que el ser humano conozca esta relación causal.
- Tener poder de disposición sobre el objeto, de modo que pueda ser utilizado para satisfacer la necesidad.
Clasificación según el orden de satisfacción
Se clasifican según el orden en que contribuyen a la satisfacción de necesidades:
- Primer orden: Generan satisfacción inmediata. Ejemplo: Pan.
- Segundo orden: Generan satisfacción mediata. Ejemplo: Harina.
- Tercer orden: Ejemplo: Molinos.
- Cuarto orden: Campos, cereales, trabajos específicos e instalaciones para cultivos.
Clasificación según su carácter
- Libres: No son propiedad de nadie y son abundantes en relación con su demanda. Ejemplo: Aire.
- Económicos: Son escasos en relación con su demanda y tienen propiedad definida. Ejemplo: Casa, libro, automóvil.
Clasificación según su naturaleza
- Materiales (específicos): Transcurre cierto tiempo entre su producción y su consumo.
- De consumo: Satisfacen directamente una necesidad personal. Se subdividen en:
- Durables: Pueden ser utilizados varias veces de forma continua. Su uso se distingue fácilmente del bien en sí mismo. Ejemplo: Platos y cubiertos.
- No durables: Se agotan y dejan de existir en el acto mismo del consumo. Ejemplo: Comida, leña.
- De capital (bienes de producción): Son durables, destinados a la producción, y atienden indirectamente a las necesidades personales.
- De consumo: Satisfacen directamente una necesidad personal. Se subdividen en:
- Servicios: Bienes inmateriales que satisfacen necesidades humanas directa o indirectamente. Pueden ser provistos por personas o bienes durables. Se subdividen en:
- Personales: Servicios brindados por personas, producidos y consumidos simultáneamente. Ejemplo: Educación, transporte.
- De bienes durables: Servicios brindados por bienes de consumo durables o de capital. Ejemplo: Uso de una tostadora o una máquina de producir zapatos.
Clasificación según su función
- Intermedios: Deben sufrir transformaciones antes de convertirse en bienes de consumo o de capital. Ejemplo: Trigo para hacer pan.
- Finales: Ya han sufrido las transformaciones necesarias para su uso o consumo. Ejemplo: Lavarropas.
Clasificación según el tipo de necesidad que satisfacen
- Privados: Rige el principio de exclusión; si son consumidos por una persona, no pueden ser consumidos por otra. Son provistos por el mercado.
- Sociales: Pueden ser consumidos en cantidades iguales por todos. Son provistos por el gobierno.
- Preferentes: La sociedad considera que todos deben recibirlos, independientemente de su renta. Son provistos por el gobierno y el mercado, pero no son consumidos en iguales cantidades por todos.
Clasificación según el momento de disponibilidad
- Presentes: Están disponibles inmediatamente.
- Futuros: Se pueden obtener a corto plazo.
Clasificación según la forma de uso
- Complementarios: Deben ser usados juntos para satisfacer una necesidad. Ejemplo: Raqueta y pelota.
- Sustitutos: Son útiles para satisfacer una misma necesidad.
Clasificación según la forma de producción
- Actividad Primaria: Abarca los sectores vinculados con los recursos naturales.
- Actividad Secundaria: Domina el proceso de transformación.
- Actividad Terciaria: Comprende los servicios.
Clasificación según la forma de riqueza
- Patrimonio: Conjunto de bienes disponibles o stock de bienes en una fecha determinada.
- Renta: Flujo de bienes disponibles durante un período.
Teoría de la Utilidad
Se considera útil a todo bien o servicio que, según la consideración individual del consumidor, satisfaga una necesidad. La utilidad se atribuye de forma subjetiva, independientemente de cualquier otra consideración que no sea la del propio consumidor. La utilidad debe medirse para explicar el comportamiento del consumidor en cuanto al grado de satisfacción que le provoca el consumo.
La utilidad cardinal proponía que la utilidad era medible, asignando valores absolutos al bienestar derivado del consumo de un bien. Aunque no existe una unidad de medida precisa para cuantificar la satisfacción, sí se puede identificar la preferencia de un consumidor por un bien sobre otro. Lo crucial es la supuesta posibilidad de medir cardinalmente la utilidad. Esta medición permite expresar una función de utilidad que refleja el ordenamiento dado por el consumidor a distintos conjuntos de bienes.
Competencia Perfecta
La competencia perfecta es un concepto preciso que describe un mercado totalmente impersonal o virtual, donde no existe rivalidad directa entre los productores. Hay una ausencia completa de competencia directa entre los agentes económicos. Este tipo de mercado garantiza un entorno libre e impersonal, en el que las fuerzas de la oferta y la demanda determinan la asignación de recursos y la distribución del ingreso.
Competencia Imperfecta
La competencia imperfecta surge cuando algunos agentes tienen poder de mercado. Estos agentes pueden influir en los precios por sí mismos, lo que generalmente conduce a una asignación ineficiente de los recursos.