Chiavenato

Las personas y las organizaciones

Para superar sus limitaciones personales, las personas se agrupan para formar organizaciones orientadas al logro de objetivos comunes. Si crecen, las organizaciones deben incorporar más personas, las cuales persiguen objetivos individuales diferentes. Esto hace que los objetivos organizacionales (producción, rentabilidad, reducción de costos, ampliación de mercado, etc.) se alejen de los objetivos individuales de los nuevos participantes. No siempre la relación individuo-organización es cooperativa y satisfactoria; muchas veces es tensa y conflictiva. Las organizaciones que tienen una concepción formal y rígida tienden a generar en sus empleados sentimientos de frustración, conflicto, pérdida y una corta perspectiva temporal de permanencia en el cargo. Todo esto causado por tareas en las que no se puede demostrar responsabilidad, autoconfianza e independencia. Esto provoca en el empleado frustración y desinterés. La mayor parte de la responsabilidad en cuanto a la integración de ambos objetivos recae en la alta gerencia. El recurso humano es invaluable e indispensable y ambos objetivos están íntimamente relacionados. El individuo proporciona habilidad, conocimiento, capacidad y destreza. La organización impone responsabilidades, algunas dentro de la capacidad del empleado y otras planteadas como desafíos. Es un proceso recíproco, un contrato psicológico, un contrato tácito entre el individuo y la organización. El individuo debe ser eficaz (alcanzar los objetivos organizacionales mediante su participación) y eficiente (satisfacer sus necesidades individuales mediante su participación) para sobrevivir dentro del sistema.

La interacción entre personas y organizaciones puede explicarse mediante el intercambio de incentivos y contribuciones. Los incentivos (o alicientes, recompensas, estímulos) son “pagos” hechos por la organización a sus empleados (salario, premios, beneficios sociales, oportunidad de progreso, estabilidad en el cargo, elogios, etc.). Las contribuciones son “pagos” que cada trabajador hace a la organización (trabajo, esfuerzo, dedicación, puntualidad, esmero, etc.) a cambio de incentivos. El equilibrio organizacional refleja el éxito de la organización en cuanto a “remunerar” a sus empleados con incentivos adecuados y los motiva a seguir contribuyendo a la organización, con lo cual garantiza su supervivencia y su eficacia. Los incentivos deben ser útiles para los participantes y las contribuciones útiles para la organización para que ésta sea solvente.

Edgar Schein

Organización

Una organización es la coordinación planificada de las actividades de un grupo de personas para procurar el logro de un objetivo o propósito explícito y común, a través de la división del trabajo y funciones, y a través de una jerarquía de autoridad y responsabilidad.

El hombre solo es incapaz de satisfacer todas sus necesidades; sin embargo, cuando varias personas coordinan sus esfuerzos descubren que juntos producen más que cada uno por separado. Para que esta coordinación tenga utilidad, estas personas deben tener objetivos comunes. Si diferentes partes están haciendo cosas diferentes, se necesita entonces una función integradora que asegure que todos los elementos están buscando los mismos objetivos comunes; la forma más típica es la jerarquía de autoridad.

Esto es organización formal. Se pueden distinguir otros dos tipos de organizaciones: la organización social, que son patrones de coordinación que surgen espontáneamente o implícitamente de la interacción humana, y la organización informal, que son patrones de coordinación que surgen entre los miembros de una organización formal y que no están estipulados en el manual.

Esto no se ajusta del todo a la realidad por diversos factores como, por ejemplo, la dinámica interna o la influencia del medio.

Por tanto, se debería ver a las organizaciones como sistemas sociotécnicos complejos, en los que los factores sociales, tecnológicos y ambientales interactúan en forma compleja con la organización.

Contrato Psicológico

Se trata de crear condiciones que permitan mantener por bastante tiempo un alto nivel de eficiencia y que le permitan también a cada empleado satisfacer sus necesidades más apremiantes a través de estímulos e incentivos para aumentar su motivación.

Un elemento clave del contrato psicológico es que los empleados acepten el sistema de autoridad vigente.

DeBoard

Teoría General de los sistemas

Se define al sistema como un todo compuesto por partes en una disposición ordenada de acuerdo con un esquema o plan. Una serie o conjunto de cosas conectadas de manera tal de formar una unidad compleja. Hay dos tipos de sistemas:

• Un sistema cerrado es independiente de su medio.
• Por contraste, un sistema abierto se halla en continuo contacto con su medio.

El individuo existe como un sistema abierto y debe interactuar con el mundo en que vive, abarcando múltiples tareas. Para llevar a cabo una tarea específica, el individuo debe asumir también un rol específico. Cada una de estas tareas requiere una combinación de diferentes actitudes y aptitudes personales. El éxito de cada rol en función de su eficacia dependerá del equilibrio e integración mantenidos entre las necesidades y recursos del individuo, y las demandas del mundo exterior.

La organización es un sistema abierto por cuanto existe dentro de un medio dado y continuamente debe importar materiales y gente de ese medio. Esas importaciones se utilizan para producir productos o servicios con el fin de exportarlos al medio con valor agregado.