Diferencias Clave entre los Mercados
Número de participantes
El número de vendedores y compradores es un factor fundamental, ya que influye en la determinación del nivel de precios.
Dimensión del mercado y cuotas
La dimensión del mercado viene determinada por la cantidad total de ventas, mientras que la cuota de mercado representa el porcentaje de ventas que corresponde a una empresa específica dentro del total.
Fórmula: Cuota de Mercado (CM) = Ventas de la empresa / Ventas totales del mercado
Poder de mercado
Algunas empresas deben adaptarse a las condiciones del mercado y son precio-aceptantes (no tienen capacidad individual para influir en el precio). En cambio, otras tienen poder de mercado, lo que les permite influir en la fijación de los precios.
Producto homogéneo o diferenciado
Un producto es homogéneo cuando los bienes ofrecidos por distintas empresas son idénticos para el consumidor. La diferenciación de un producto consiste en dotarlo de características (calidad, marca, diseño, etc.) que lo distinguen de los productos competidores.
Existencia de barreras de entrada
Existen barreras de entrada cuando hay obstáculos o dificultades (de tipo legal, económico, tecnológico, etc.) que limitan o impiden la entrada de nuevas empresas a un mercado.
Competencia Perfecta
En un mercado de competencia perfecta, las empresas no tienen capacidad individual para influir en el precio del mercado. Se caracteriza por ser un mercado con muchas empresas pequeñas que venden un producto idéntico (homogéneo), cuyo precio viene determinado por la oferta y la demanda totales del mercado.
Características de la Competencia Perfecta
- Existen muchas pequeñas empresas y muchos compradores.
- Las empresas son precio-aceptantes.
- Hay total libertad de entrada y salida del mercado.
- El producto es homogéneo.
- Existe información perfecta (todos los participantes conocen las características del producto y las condiciones del mercado).
¿Por qué la curva de demanda de una empresa en competencia perfecta es horizontal?
La curva de demanda a la que se enfrenta una empresa individual en competencia perfecta es horizontal (perfectamente elástica) porque su producción es tan pequeña en relación con el total del mercado que, aunque la aumente o disminuya, no alterará el precio de mercado. Puede vender cualquier cantidad al precio de mercado.
Comparación entre Monopolio y Competencia Perfecta
Generalmente, los mercados de competencia perfecta alcanzan una mayor eficiencia que los monopolios. Los monopolios pueden perjudicar a los consumidores, ya que estos no pueden elegir entre distintos oferentes y pueden verse obligados a aceptar precios más altos y cantidades disponibles menores en comparación con una situación de competencia.
Medidas Gubernamentales contra el Poder de Monopolio
Los gobiernos suelen tomar medidas para limitar el poder de mercado y fomentar la competencia:
- Leyes antimonopolio: Regulan las fusiones y adquisiciones e impiden prácticas anticompetitivas.
- Establecimiento de precios máximos: Para determinados bienes y servicios ofrecidos por monopolios naturales o regulados.
- Creación de instituciones de defensa de la competencia: Organismos que vigilan y sancionan acuerdos y prácticas contrarias a la competencia (Ej: CNMC – Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia en España).
Oligopolio y Teoría de Juegos
En mercados con pocos competidores (oligopolio), las decisiones de cada empresa afectan significativamente a las demás. Para analizar estas situaciones de interdependencia estratégica, se utiliza la teoría de juegos, que estudia el comportamiento de los individuos o empresas en situaciones donde las acciones de un participante influyen tanto en su propio resultado como en el de los demás.
El Mercado de Trabajo y el Empleo
El trabajo es la aportación física e intelectual que realiza el ser humano en la producción de bienes y servicios. El salario es la remuneración (dinero o en especie) que reciben los trabajadores por sus aportaciones.
La Oferta y la Demanda de Trabajo
(Nota: SMI se refiere al Salario Mínimo Interprofesional, fijado por el gobierno)
En cada país existe un nivel medio de salarios. Para comprender su determinación, se suele analizar el funcionamiento del mercado de trabajo, a menudo utilizando el modelo de competencia perfecta como punto de partida:
Oferta de Trabajo (Trabajadores)
La cantidad de trabajo ofrecida en un mercado depende del volumen de población activa y del número de horas que las personas estén dispuestas a trabajar a diferentes niveles salariales. La curva de oferta de trabajo individual puede tener diferentes formas, pero la curva de oferta de trabajo del mercado suele ser creciente: si aumentan los salarios (ceteris paribus), generalmente, más personas están motivadas para trabajar o dispuestas a trabajar más horas (y viceversa).
Demanda de Trabajo (Empresarios)
La demanda de trabajo por parte de las empresas depende fundamentalmente del salario y de la productividad de los trabajadores. Si los salarios aumentan (manteniendo lo demás constante, como la productividad y el precio del producto), las empresas tenderán a contratar menos empleados porque aumenta el coste de producción. Por eso, la curva de demanda de trabajo es decreciente.
Salario de Equilibrio
Es el punto donde se cortan las curvas de oferta y demanda de trabajo. Representa el salario para el cual la cantidad de trabajadores dispuestos a trabajar coincide con la cantidad que los empresarios desean contratar. En teoría, a este salario, no habría desempleo involuntario.
El Problema del Desempleo
La población en paro o desempleada es aquella parte de la población activa (personas en edad de trabajar que quieren y pueden hacerlo) que busca activamente trabajo y no lo encuentra. El desempleo es uno de los problemas económicos y sociales más importantes de muchas economías.
- Costos económicos: Supone un despilfarro de recursos productivos (mano de obra no utilizada), menor producción potencial, menores ingresos fiscales y mayor gasto público en prestaciones.
- Costos sociales: Los desempleados pueden enfrentar dificultades económicas, pérdida de autoestima, problemas de salud, exclusión social y tensiones familiares.
La Medición del Desempleo
En España, se utilizan principalmente dos procedimientos para medir el desempleo:
- Encuesta de Población Activa (EPA): Realizada trimestralmente por el Instituto Nacional de Estadística (INE) mediante encuestas a hogares. Sigue criterios internacionales (OIT) y considera desempleada a la población de 16 años o más que está sin trabajo durante la semana de referencia, disponible para trabajar y buscando activamente empleo en las últimas cuatro semanas. Es la medida más utilizada para comparaciones internacionales.
- Paro Registrado: Medición mensual realizada por el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE). Solo contabiliza a las personas que están inscritas como demandantes de empleo en sus oficinas en una fecha concreta. No incluye a todos los que buscan empleo (ej: estudiantes buscando primer empleo, personas buscando mejorar su trabajo actual sin registrarse). Generalmente, las cifras de paro registrado son inferiores a las de la EPA.
Las Causas del Desempleo
Existen diferentes enfoques teóricos sobre las causas del desempleo:
Perspectiva Neoclásica (o Liberalismo Económico)
Desde esta perspectiva, el desempleo persistente (por encima del nivel friccional) se produce porque el mercado de trabajo no funciona libremente, es decir, existen rigideces que impiden que los salarios se ajusten para equilibrar oferta y demanda. En un mercado laboral perfectamente flexible, un exceso de oferta de trabajadores (desempleo) provocaría una bajada de los salarios reales, lo que incentivaría a las empresas a contratar más personal y desincentivaría la oferta de trabajo, eliminando así el paro involuntario. Se argumenta que los salarios no son suficientemente flexibles a la baja debido a factores como la acción de los sindicatos, el salario mínimo establecido por el gobierno, las indemnizaciones por despido y otras regulaciones laborales.
Perspectiva Keynesiana
Según la teoría keynesiana, la causa principal del desempleo (especialmente el desempleo cíclico) es una insuficiencia de la demanda agregada en la economía. La cantidad de trabajadores que necesitan las empresas está condicionada por el volumen de producción que esperan vender. Cuando la demanda global de bienes y servicios (consumo, inversión, gasto público, exportaciones netas) es baja, las empresas disminuyen su producción y, en consecuencia, despiden trabajadores o no contratan nuevos, generando desempleo involuntario, incluso si los salarios fueran flexibles.
Esta teoría es crítica con la idea de que bajar los salarios soluciona el desempleo masivo en una recesión, ya que argumenta que esto reduciría la renta disponible de los trabajadores, disminuyendo aún más el consumo y la demanda agregada, lo que podría agravar el problema (la «paradoja del ahorro»). Los keynesianos defienden la intervención activa del Estado (a través de políticas fiscales y monetarias expansivas) como motor para estimular la demanda agregada y, con ello, la creación de empleo.
Tipos de Desempleo
Según las causas que lo provocan, se suelen distinguir varios tipos de desempleo:
- Desempleo friccional: Es el desempleo temporal asociado a los procesos normales de búsqueda y cambio de empleo (personas que dejan un trabajo voluntariamente para buscar otro mejor, jóvenes que buscan su primer empleo, trabajadores que se reincorporan al mercado laboral). Es considerado inevitable y hasta cierto punto deseable en una economía dinámica.
- Desempleo estacional: Se genera en determinadas épocas del año debido a la naturaleza estacional de algunas actividades económicas (ej: turismo de sol y playa, agricultura de temporada, construcción en climas fríos).
- Desempleo cíclico: Está directamente asociado a las fluctuaciones del ciclo económico. Aumenta significativamente durante las recesiones o crisis económicas (cuando cae la demanda agregada) y disminuye durante las fases de expansión económica. Es el tipo de desempleo que más preocupa desde la perspectiva keynesiana.
- Desempleo estructural: Es un desempleo de larga duración causado por desajustes persistentes entre la cualificación, habilidades o localización de los trabajadores (oferta de trabajo) y las requeridas por los puestos de trabajo ofrecidos por las empresas (demanda de trabajo). Puede deberse a cambios tecnológicos profundos, declive de ciertos sectores industriales, globalización, o una inadecuada formación y capacitación de la fuerza laboral. Requiere políticas a largo plazo para solucionarse.
Políticas de Empleo
La creación de empleo y la protección de los desempleados suelen ser objetivos prioritarios de las políticas económicas gubernamentales. Se distinguen entre políticas activas y pasivas:
Medidas Activas de Empleo
Tienen como objetivo mejorar el funcionamiento del mercado laboral y aumentar la empleabilidad de los trabajadores.
- Medidas sobre la demanda de trabajo: Incentivos a la contratación (subvenciones, bonificaciones a la seguridad social), fomento del emprendimiento y la creación de empresas, inversión pública en infraestructuras, ayudas a sectores específicos.
- Medidas sobre la oferta de trabajo: Acciones orientadas a ajustar la oferta laboral o redistribuir el empleo existente, como programas de reparto del empleo (reducción negociada de la jornada laboral, limitación de horas extraordinarias), fomento del trabajo a tiempo parcial voluntario, políticas de jubilación anticipada o gradual.
- Medidas de formación e intermediación: Programas para adecuar la formación y cualificación de los trabajadores a las necesidades cambiantes del mercado (formación profesional continua, reciclaje profesional, programas para jóvenes o parados de larga duración). Servicios públicos y privados de empleo que facilitan la intermediación laboral (conectar oferta y demanda).
Medidas Pasivas (Protección por Desempleo)
Su objetivo principal es proporcionar una red de seguridad económica a las personas que han perdido su empleo.
- Prestaciones y subsidios por desempleo: Ayudas económicas temporales concedidas por el Estado a los trabajadores desempleados que cumplen ciertos requisitos (haber cotizado previamente, estar buscando activamente empleo), mientras buscan un nuevo trabajo. Proporcionan una renta sustitutiva, ayudan a mantener un nivel mínimo de consumo y contribuyen a la estabilidad social.
Aspectos No Recogidos por el PIB
El Producto Interior Bruto (PIB) es el indicador más utilizado para medir el valor de la producción de bienes y servicios finales de una economía en un período determinado. Sin embargo, tiene limitaciones importantes y no mide toda la actividad económica ni refleja completamente el bienestar de la sociedad:
- Trabajo doméstico no remunerado: Las tareas del hogar (limpieza, cuidado de niños o ancianos, cocina, etc.) realizadas por los miembros de la familia no se incluyen en el cálculo del PIB, a pesar de generar un valor considerable. Sin embargo, si se contrata a una persona externa para realizar esas mismas tareas, su salario sí se contabiliza.
- Trabajo voluntario: La actividad realizada por voluntarios en ONGs u otras organizaciones sin ánimo de lucro tampoco se incluye, aunque genere servicios valiosos para la comunidad.
- Operaciones de trueque: Los intercambios directos de bienes y servicios sin mediación de dinero no suelen registrarse.
- Economía sumergida (o informal): Incluye tanto actividades económicas legales pero no declaradas a la administración (para evadir impuestos, cotizaciones sociales o regulaciones) como actividades directamente ilegales (tráfico de drogas, contrabando, etc.). Su valor no se recoge (o se estima de forma indirecta y parcial) en las cuentas nacionales oficiales. En algunos países como España, se estima que la economía sumergida puede representar un porcentaje significativo del PIB (algunas estimaciones la sitúan en torno al 15-25%, aunque su medición es intrínsecamente difícil y varía según la metodología).
- Otras limitaciones: El PIB no mide la distribución de la renta, la calidad de vida, el nivel de salud o educación, el ocio, el impacto medioambiental de la producción (externalidades negativas), ni el agotamiento de los recursos naturales.